17.10.13

GRACIAS, PRESIDENTE RAJOY


                            


·        Gracias, Presidente Rajoy, por abrirnos los ojos. Nunca hasta ahora nos había parecido tan odioso un modelo de sociedad como el que usted lidera (por decir algo)

·        Gracias, P.R., por vacunarnos contra una derecha que hace tan cruel y desolada la vida cotidiana de los españoles y de los que conviven con nosotros.

·        Gracias, P.R., por sus torpes embustes, tan ridículos como esclarecedores de las tropelías de su Partido.

·        Gracias, P.R., porque su política está dignificando –por contraste- a la buena gente de la izquierda.

·        Gracias, P.R., porque sus ataques a la dignidad de las personas nos han unido más allá de nuestras ideologías.

·        Gracias, P.R., porque su neurótico inmovilismo estimula nuestras entusiastas movilizaciones.

·        Gracias, P.R., porque su entrega a los mercados han espoleado nuestra rebeldía e insumisión.

·        Gracias,  P.R., ya que su demente afán privatizador hará que tomemos la Bastilla de lo público.

·        Gracias, P.R., pues la comparación con los ministros elegidos por usted acrecienta nuestra talla moral.

·        Gracias, P.R., porque su inutilidad nos hace más capaces para dirigir una regeneración democrática.

·        Gracias, P.R., porque su destrozo de las libertades y del estado de bienestar disipan las dudas de lo que realmente queremos.

·        Gracias, P.R., por los servicios prestados a una ciudadanía cada vez más lúcida. Hasta nunca.

 

 

14.10.13

A PROPÓSITO DE FEMEN


                                                       

Hace algún tiempo que sabemos de ellas: chicas ucranianas y rusas que protestaban con sus senos desnudos contra el Patriarca Ortodoxo, pintando en sus cuerpos aquello de “Kill Kirill” (matar a Cirilo) por la institución misógina y retrógrada que representa; en abril pasado contra la política dictatorial de Putin como gran Zar de todas las Rusias (fuck dictador) en Hannover junto a otros líderes europeos o varias veces en su país de origen, Ucrania, para protestar contra el turismo sexual, la pornografía y la miserable condición de ser mujer en aquellas latitudes, donde está prosperando la lucrativa profesión de proxeneta como horizonte empresarial con gran futuro.

 

El nombre es una síntesis entre female (hembra y femenino) y women (mujeres). Me parece un acierto porque no deja nada fuera: la hembra como cuerpo diferenciado, lo femenino como simbólico, las mujeres como realidad individual y de grupo. FEMEN es un nombre potente, tan potente como su praxis, ya que un cuerpo desnudo que protesta constituye un signo de identidad que grita libertad. Cuando esos cuerpos desnudos de mujer se exhiben en las ‘salas de alterne’ no suscitan escándalo alguno, ya que se trata de cuerpos sumisos, obedientes, denigrados y esclavos, que es lo que corresponde a la situación de las mujeres respecto a los machos que pagan por esa representación de su poder, de su miserable poder. ¿A qué viene tanto escándalo cuando esos mismos cuerpos gritan y acusan?

 

Ahora han irrumpido nada menos que en el Parlamento español para escarnio y rasgado de vestiduras de sus señorías. Fueron reducidas como si un grupo de terroristas armados hasta los dientes hubiera asaltado el sagrado hemiciclo, cuando ellas clamaban por otra sacralidad: aborto es sagrado, aborto es sagrado, aborto es sagrado…. Estupefacción. Caras de lelos, secreto regodeo, balbuceo de Ministro, ridículo al fin ante tres muchachas con sus pechos desnudos como armas de destrucción masiva. Destrucción de su hipocresía, de su falso puritanismo, de sus leyes injustas (ley justa se está convirtiendo con este Gobierno en un oxímoron), de sus vacuos discursos, de sus secretas intenciones, de su evidente crueldad con la ciudadanía.

 

Creo que las chicas de FEMEN tienen una lista de espera más abultada que la de la Seguridad Social: ¡Bravo! Ya iba siendo hora de la renovación de un feminismo demasiado oficialista y políticamente correcto. FEMEN constituye un revulsivo, no sólo para ‘ellos’, sino también –y sobre todo- para ‘nosotras’. Tal vez ellas hayan comprendido la gravedad de la situación actual.

 

Cuando en Sol, durante la larga concentración que resistió al frío, a la lluvia, a las mil incomodidades y a la indiferencia de los políticos (como máscara de su miedo), una chica se atrevió a colgar una pancarta con el lema LA REVOLUCIÓN SERÁ FEMINISTA O NO SERÁ. Llegó un machito y la arrancó ante los aplausos del respetable y allí no pasó nada. Si la chica lo hubiera hecho a pecho descubierto, lo de la revolución feminista se lo habrían tomado más en serio. Es cuestión de sordera estructural: no se enteran, por eso hay que hacer las cosas de manera más bulliciosa.   

 

Para hacer justicia diré que la respuesta de IU, amonestada por sus aplausos a las chicas de FEMEN en el Parlamento, fue la única digna que tuvo lugar: en unas Cortes en las que se aplauden con entusiasmo y fervor tantas leyes injustas, tantas peroratas mentirosas, tantos recortes, tantas ayudas a la Banca y otras muchas tropelías, ¿por qué no aplaudir la voz del pueblo? ¿Por qué no encomiar la valentía de las nuevas amazonas contra la injusticia y la desigualdad? No son batallitas sin importancia. Son la punta de lanza de una guerra declarada contra el Patriarcado, que lleva seis mil años jodiéndonos la vida y ya está bien. YA LES VALE ¿NO? Espero que muchos hombres sensibles y que puedan entender el mensaje se unan a la justa causa de las mujeres del mundo. Gracias, FEMEN.

8.10.13

LA MALDITA BANALIDAD DEL PP


No me gusta personalizar, pero en este caso poner nombres es inevitable porque la trágica deriva del pasado siglo XX se saldó con juicios a los culpables con nombres y apellidos en Nuremberg, en Jerusalén años más tarde al nazi huido a la Argentina, Karl Adolf Eichmann, o en los más recientes, a los líderes carniceros de la guerra de la ex Yugoslavia. Pero ahora, con la experiencia histórica, no tendríamos que aguardar a un futuro que condenara a los culpables de esta crisis, cuyo devenir puede ser tan negro o más que los horrores vividos por nuestros padres y abuelos en Europa.

 

La actualidad del film de Margarethe von Trotta sobre Hannah Arendt me sirve de argumento para lo que aquí quiero expresar. La filósofa judio-alemana asistió al juicio en Jerusalén del nazi Karl Adolf Eichmann para enviar sus reportajes al New Yorker. La compilación de todos aquellos artículos la podemos leer en ‘Eichmann en Jerusalén o un estudio sobre la banalidad del mal’. Su tesis fundamental es que aquel oscuro funcionario de las SS –que ‘gestionó’ la deportación de cinco millones de judíos a los campos de concentración alemanes durante la Segunda Guerra- no era tanto un monstruo asesino como el típico burócrata afanoso y obediente que, según él, “nunca había tenido nada contra los judíos”. Su entusiasmo por la “solución final” estaba alentada por aquella locura colectiva de los seguidores de Hitler: “En su vida monótona, vacía de sentido, desprovista de importancia, había soplado el viento de la Historia”, escribía Arendt. Sus alegaciones siempre se remitían a que obedecía órdenes y, por tanto, no se sentía responsable. Él sólo cumplía con su deber.

 

Sin intención alguna de comparar a un personaje con otro en su dimensión humana, el perfil de Rajoy me recuerda en la misma actitud de obedecer normas. La diferencia es que este personaje, igual de oscuro y mediocre, es Presidente de un gobierno que está deportando a millones de ciudadanos al paro, a la miseria, a la ignorancia, a la emigración y a la enfermedad. Él nunca ha matado a nadie con sus propias manos, como Eichmann. Y cuando la Historia quiera juzgarlo, él responderá, igual que el nazi, que obedecía a Merkel, al BCE, a la Comisión Europea. Si es así ¿por qué no dimite? ¿Qué pinta él en semejante cargo? Claro que la actitud de nuestro Gobierno no es sólo la de cumplir normas por cumplirlas. Aún recuerdo una declaración de Gallardón que decía: “No hacemos todo esto por obligación, sino porque estamos de acuerdo”. Se refería a los recortes y al desmantelamiento de lo público. Yo diría que están felices de tener una disculpa poderosa.

 

Estamos rodeados de tragedias humanas o nos golpean ya de lleno, pero no importa. Ana Botella, que vende el “relaxing cup” hacia el exterior, acaba de soltar que “hay que cumplir la ley aunque suponga un auténtico drama para las personas”, también igual que Eichmann, pero más banal si cabe. ¿A qué leyes se refiere? ¿A las que ellos confeccionan para salvar al capital caiga quien caiga? ¿A las leyes que están dispuestos a cambiar para el carísimo ‘puticlub’ de Sheldon Adelson con disfraz de casino?

 

Los intereses que pagamos por el rescate de los bancos expoliados por sus directivos ascienden ya al presupuesto para todos los ministerios. ¿Por qué no se niegan a pagar como lo hicieron algunos gobiernos latinoamericanos cuando les tendieron la misma trampa? ¿Por qué no inhabilitamos a políticos cuyo máximo interés es privatizar lo público, que constituye una contradicción en los términos? ¿Qué hace ahí una Mato, cuyos obedientes afanes consisten en desmantelar el sistema público de salud y arruinar o matar a los enfermos crónicos, a desahuciar a los sin papeles? ¿Qué significa la banalidad de un Wert que parece divertirse con la liquidación de la investigación, la subida de tasas universitarias, la restricción dramática de becas o la eliminación de las ayudas de comedor o de libros?

 

¿Y qué me dicen de un Gallardón –príncipe de las tinieblas, como lo definió Llamazares- impidiendo con sus tasas el acceso a la justicia de los más pobres, catapultándonos a la caverna en lo referente al aborto o a una custodia compartida sin discernimiento entre padres y padres? ¿O un Cañete liberando nuestras costas a la depredación inmobiliaria mientras sabemos que el nivel de los mares puede subir casi un metro de aquí a fin de siglo? ¿Qué malsana intención anida en la aniquilación de las energías alternativas cuando éramos líderes en esas tecnologías?

 

El zorro no puede estar guardando las gallinas. Y Rajoy es un zorro en el gallinero. No tanto por su banalidad, como por la maldad que supone su banalidad, su falta de visión de futuro y presente, su idiota obediencia a los grandes, su abandono de la ciudadanía y sus mentiras, sus clamorosas mentiras. Hay que montar un Nuremberg ya, un Nuremberg simbólico, ahora mismo, antes de que la situación sea irreversible. Toda la ciudadanía deberíamos participar en ese macrojuicio como acusación particular y testigos de cargo.

9.9.13

LA CORTE DE LOS MILAGROS


                

 Antes de bajarme un rato a la playa he tomado un libro al azar de esos que me gusta releer: “La Corte de los milagros” de Valle Inclán. Y me he quedado estupefacta: ¡Estamos igual que en tiempos de Isabel II de Borbón, ‘la chata’, reinante en el ya lejano siglo XIX! Ha sido llegar la derechona y abrirse el frasco de las esencias más rancias y cavernícolas de la España eterna. Unas pocas citas bastarán, y ya verán cómo les suena.

 

“Sus laureadas calvas se fruncían de perplejidades con los tropos de la oratoria demagógica”. Ahora, en vez de calvas, proliferan rubias de bote que hablan de finiquitos simulados y en diferido, de movilidad externa en lugar de emigración forzosa, de perroflautas malolientes en Sol, y hasta exclaman sin demagogias ¡que se jodan! cuando se trata de parados.

 

-“¡Pegar fuerte a ver si se enmiendan! ¡No se enmendaban!” Alguna ciudadana se quedó tuerta, pero el conseller del ramo jura impertérrito que jamás se dispararon pelotas de goma. Muchos fueron arrastrados y golpeados, pero la gente sigue en las calles.

 

“Los banqueros sacan el oro de sus cajas fuertes para situarlo en la pérfida Albión (…) Todo lo acarreaba la judaica pasión por los bienes terrenales, ahora más temosa con la quiebra fraudulenta del Banco de Castilla”. De esos tenemos muchos, pero en lugar de la City de London, su destino es ahora la plácida Suiza o a las exóticas Islas Caimán. Pagamos sus astronómicos retiros y rescatamos los bancos hundidos por su inepta gestión mientras los impuestos suben y los sueldos bajan. Les invade su sed de oro. Y el resto pagamos su enriquecimiento con una brutal crisis inventada y diseñada a su medida.

 

“Astures y vizcaínos de las minas promueven utópicas rebeldías por aumentar sus salarios”. Todavía recuerdo la emocionante entrada en Madrid de los mineros asturianos con sus linternas encendidas en la noche. ¿Qué pasó? Nada. La Corte de los milagros ni sabe ni contesta: sólo se atrinchera.

 

“Desde todas las esquinas nacionales lanzaban roncas contra las logias masónicas, que en sus concilios de medianoche habían decretado la revolución incendiaria, el amor libre y el reparto de bienes”. Los masones de entonces eran los liberales que más tarde se atrincheraron en Cádiz para hacer la primera Constitución contra el poder absolutista. Los liberales de hoy sólo creen en la ‘libertad de mercado’, pues las demás libertades se las pasan por el arco de la Puerta de Alcalá. Mírala, mírala… la, la, la, la.

 

“En Lucena, Montilla y Villar del Duque, los gremios menestrales y las peonadas agrarias asaltaban los archivos municipales y les ponían lumbre. Era su clamor por el reparto de tierras”. Hoy asaltan supermercados para repartir material escolar. O se enfrentan a los mismos duques y duquesas de entonces, que reciben suculentos cheques por extensas fincas baldías, mientras lucen palmito en Ibiza o Marbella. Y esto después de treinta años de gobierno socialista en Andalucía. Por decir algo.

 

“Con el susto de las represalias se fugaban a las capitales de provincia los caciques y alcaldes de Real Orden. Se desvanecían los alguaciles y chulos del resguardo”. Ahora se refugian en escaños del Parlamento o del Senado. Otros se apalancan en diputaciones, que son ya cementerios de elefantes amortizados que sestean sobre nuestras costillas o los meten en listas de ERES fraudulentos.

 

“Las negras sotanas escalaban los cerros capitaneando las fanáticas rogativas. Sobre el horizonte incendiado, los niños pastores señalaban las celestes apariciones”. Las negras sotanas, que en la anterior legislatura capitaneaban manifestaciones contra el pérfido Zapatero, hoy susurran al oído de Gallardón, que está más que dispuesto a sepultarnos en la eterna España católica con soflamas de libertad para las gestantes y proclamas de igualdad para los padres ofendidos y maltratados por la legendaria maldad de las mujeres, que lo quieren todo, incluidos los hijos.

 

Otros muchos esperpentos siguen desvelando nuestros sueños: el Eurovegas, el turismo sanitario, los seis millones de parados, los brotes verdes, el final del túnel, el “no me consta”, “no recuerdo”, ¡que inventen ellos!, el secular déficit tarifario de la energía, la gripe A y el ‘tamiflú’ de Donald Rumsfeld. Afortunadamente ha caído lo que iba a ser la ruina final de los Juegos Olímpicos. Sólo lo siento por los deportistas. Pero no importa, nuestra fe nos salvará: ¡Viva la Virgen del Rocío!

 

Señoras y señores: el secreto de todo éste ‘eterno retorno’ es que España se  ha modernizado muchíiiisimo, pero sin rozar siquiera la Modernidad.

26.7.13

LO PÚBLICO

Tras el funesto accidente de Santiago de Compostela, el Presidente de Galicia ha soltado algo así como que en los momentos trágicos se comprueba la grandeza de un pueblo. Ya. De acuerdo, pero más vale que se calle. Al instante mismo de descarrilar el tren, fueron los vecinos de la aldea de Angrois los que acudieron a colaborar con las víctimas. Inmediatamente aparecieron ambulancias, helicópteros, policía, bomberos, que estaban en huelga, pero que se olvidaron de ella. Inmediatamente los hospitales se llenaron de personal sanitario que acudió sin ser llamado. Daba igual que estuvieran de vacaciones, a cientos de kilómetros, o bien, de paso por Galicia. Fue increíble. Igual sucedió con los psicólogos voluntarios o los forenses. Y no digamos con la ciudadanía, que acudió en masa a donar sangre, sobre todo los jóvenes. Vinieron hasta de Extremadura, a 1.200 kilómetros de distancia. Me emocionó comprobar cómo el ser humano no es un lobo para el otro (Hobbes), ni que la evolución se deba al triunfo del más fuerte (Darwin/Huxley) o que lo más eficaz sea nuestro ‘gen egoísta’ (Hawkins). Existe un VÍNCULO secreto entre todo el género humano que es el que nos ha hecho sobrevivir. Son algunos tarados –que normalmente se hacen con el poder- los que se empeñan en destruir este vínculo porque les hace más poderosos y menos humanos, pos supuesto.
         Pues sí, señor Presidente de Galicia y de España, la atención tan eficaz, tan generosa, tan solidaria y tan emocionante ha sido posible por lo que queda de nuestros servicios públicos, los que hemos levantado durante cuarenta años. Esas son las gentes que han hecho posible esa PROFESIONALIDAD SOLIDARIA tan fuerte, tan potente, tan ejemplar, tan humana.

         Hoy, antes de dos días después de este horror y de esta hazaña ciudadana y de los servicios públicos, se reúne el Consejo de Ministros para seguir privatizando y desmantelando lo nuestro, LO PÚBLICO. Lo siento, pero no nos merecen. No están a la altura: ¡VÁYANSE! 

9.4.13

LOS CUERNOS


                                  
“Poner los cuernos” constituye una frase recurrente en el idioma español y significa –como todo el mundo sabe- ser infiel a la pareja. Normalmente se refiere a la infidelidad de la mujer al marido, porque a la inversa no tiene gran importancia ni mancilla el honor de nadie porque las mujeres no tenemos eso, o sea, honor. Claro que ahora, que ya vamos conquistando ciertas prerrogativas, también podemos ser cornudas. ¡Hurra!

         La cosa viene de antiguo, nada menos que desde el Génesis cuando nuestros primeros padres estaban en Edén cazando mariposas. Hete aquí que a Eva se le ocurrió saber más de la cuenta y se lió con el demonio en forma de serpiente. Ya saben, se comió la manzana que le abrían los ojos del conocimiento y le puso a Yávéh los cuernos, referidos a los apéndices con los que se representa a ese ‘daimon’.

          En el mundo pagano y clásico, Penélope le fue infiel a Ulises con el dios Hermes y concibió al dios Pan, un sátiro también con cuernos. Y lo mismo sucede con Pasifae, que copula con un gran toro blanco y concibe al Minotauro, otro ser cornudo, que pone de manifiesto su infidelidad a Minos, rey de Creta. Total que eso de los cuernos debe de estar muy arraigado en el inconsciente colectivo, ya que perdura hasta hoy mismo.

         En la lengua castellana también existen dichos referentes a los cornudos, como: ‘Maridos que se ausentan, cornamentan’ o ‘Si quieres ser cornudo vete de caza a menudo’. Ahora el ‘a menudo’ se puede aplicar al fútbol, de copas, al trabajo ‘full time’, también de caza a Boswana o a la Mancha. En fin, que hay muchas posibilidades.

        

         Los cuernos de los que quiero hablar hoy se refieren a la cornamenta que nos está creciendo a la CIUDADANÍA por parte del GOBIERNO actual. Un Gobierno muy promiscuo, por cierto. Ya lo sabemos, ya nos hemos enterado, tenemos testimonios y artículos, juicios y protestas que lo ponen de manifiesto. El Gobierno nos pone los cuernos con la Merkel, otra seductora germana que últimamente están muy de moda; con la Troika –o sea, con un trío en una orgía colectiva- no tan excitante como se supondría, visto el poco atractivo de un tal Draghi que lleva la batuta, con grandes corporaciones que nos sacan los cuartos y nos dictan leyes a través de sus ‘lobbies’: las farmacéuticas, los bancos, las energéticas, las petroleras, los intermediarios, los promotores… en fin, un montón de felonas que lo tienen cautivado. Lo sabemos todo. Lo peor es que estas juergas nos están dejando en la ruina. Otro montón de proxenetas hacen de intermediarios. Cada vez que nuestros ministros o el jefe se van a Europa nos tememos lo peor. Se van con la visa oro y vuelven pelados. Piden créditos y se los gastan en unas y otras: la Banca es la más favorecida, que encima nos chulea. Y ya no nos queda ni para ir al super a comprar macarrones. 

         Este Marido de ahora es de lo más infiel que darse pueda, y eso que venía con carita de niño de primera comunión. Encima se va a ver al Papa ¡el muy hipócrita! Nos está dejando sin casas, sin dinero para el colegio de los niños o para ir al hospital. Está vendiendo todas nuestras casas y fincas, hasta los montes, porque la verdad es que hace poco éramos una familia muy solvente, pero nos vamos a tener que tirar a la calle. Las malas compañías los han pervertido, pero el Gobierno-marido se pavonea de sus amistades, de su influencia. El muy felón tenía cuentas ocultas que ahora van saliendo. Pero ¡el colmo! ahora intenta que nos prostituyamos para seguir con sus juergas, por eso nos han puesto unas leyes propias del esclavismo sexual con un trabajo día y noche con cualquiera que nos quiera abusar.

         La verdad es que nos casamos con este Gobierno porque nos juró fidelidad y nos ofreció el oro y el moro, prometiéndonos una eterna luna de miel desprestigiando al otro pretendiente, causa de todos nuestros males. ¡Qué desfachatez! ¡Si era un santo a su lado! Lo peor es que no nos quiere dar el divorcio, pero ya estamos haciendo los papeles. Uno de estos días cambio la cerradura y le pongo los cuernos. ¡Lástima que no haya todavía un pretendiente a la altura!

        

19.2.13

LA CONTRARREFORMA DEL GOBIERNO

             
Tendremos que concluir que ‘el eterno retorno’ de Nietzsche tenía su parte de razón. Y al igual que en mi último blog ponía de manifiesto las similitudes que llevaron a los franceses a hacer su Revolución de 1789, tomar la Bastilla y desalojar Versalles, también creo que las reformas actuales en Europa  responden a un espíritu similar al que llevó al Papado a la oscurantista y cruenta aventura de la Contrarreforma entre 1560 y el fin de la Guerra de los Treinta Años en 1648.
         El Papado hoy en Europa es el Capital financiero de bancos y corporaciones, que tiene como adalides a la mayoría de los gobiernos conservadores del Continente. La Contrarreforma eclesiástica tenía como finalidad combatir la rebeldía luterana que se había enfrentado a una Iglesia corrompida con sus propuestas de libre interpretación de los textos sagrados y su independencia de Roma entre otras. ¿Y quiénes serían hoy los luteranos o protestantes? Sin duda que todas las fuerzas democráticas que desde la Segunda Guerra habían conseguido derechos y libertades para la ciudadanía como jamás antes se habían logrado. Tanto los sindicatos como los movimientos estudiantiles, las feministas, las fuerzas políticas progresistas, los pacifistas, los movimientos sociales, los ecologistas  y el movimiento obrero en general.
         La Contrarreforma de hoy comienza con una Crisis provocada, que no terminará hasta que consigan llevarnos al punto cero del sometimiento y la penuria. Cuando los trabajadores pierdan sus derechos conquistados, cuando todo lo público sea privatizado, cuando la educación y la sanidad sean un lujo sólo para potentados, cuando la democracia sea un simple eufemismo, nos anunciarán a bombo y platillo que la Crisis ha terminado. Al igual que en aquel tiempo, después de una guerra de treinta años en la que se reconquistaron las dos terceras partes de Europa para Roma, sometidas al Papado, ahora terminarán su Contrarreforma cuando nuestros derechos sean abolidos.
         Un elemento importante de aquella Contrarreforma fue la comprometida intervención de la España Imperial, de la Católica España en el triunfo definitivo del Papado. Los Tercios de Flandes y las nuevas órdenes religiosas constituyeron la punta de lanza de la regresión europea. Aquella Contrarreforma introdujo un ambiente oscurantista y policíaco que en España ha sobrevivido de modo tanto folklórico como real. El culto exuberante a santos y vírgenes, el nacimiento de cofradías y hermandades, el control de los individuos a través de la confesión, el índice de libros prohibidos, las múltiples fundaciones de órdenes religiosas, la conversión a machamartillo de los indios de la América hispana, la caza de brujas, el dispendio del barroco… en fin, una serie de elementos que han pasado a formar parte de nuestra idiosincrasia política y popular. También la Contrarreforma nos regaló la lucha contra la Ciencia y la condena de Galileo.
         Pues bien, el Gobierno actual del PP sigue al pie de la letra un programa contrarreformista, que nada tiene que ver con nuestra superación de la Crisis, sino que se vale de ésta como disculpa recurrente de lo que constituye su verdadera ideología. Quiere una España similar a la de los caciques y terratenientes con muchos vasallos a su servicio que no necesitan de una educación profesional más allá de lo básico para emplearse en los supercasinos mafiosos; quieren unos súbditos sometidos con leyes que condenan las manifestaciones o la resistencia pasiva; quieren una justicia para quien la pueda pagar y no para quien la necesite; quieren unas corporaciones poderosas que impongan trabajo esclavo; una educación confesional, unas mujeres sumisas a los hombres y a su anatomía, unos políticos vendidos y comparsas, unos sindicatos desactivados y una población temerosa y dócil a sus mandatos. No necesitan ningún Ptolomeo, ningún Galileo que haga avanzar la Ciencia y combatir la barbarie.
         Y aquellos que no quieran someterse, aquellos que no tengan cabida en esta sociedad injusta, aquellos que quieran una vida más digna –al igual que entonces- tendrán que enrolarse en los barcos que navegan hacia Eldorado. Allí morirán o triunfarán, da igual, porque aquí sobran.
         Lo terrible es que la Historia se repite. Nuestros ‘demonios familiares’ nunca se fueron del todo. Se escondían agazapados esperando su hora.

5.2.13

EL OTRO VERSALLES

El Palacio de Versalles, a las afueras de París, fue levantado –a partir de un simple pabellón de caza- por Luis XIV, el rey Sol, en 1668 y ampliado sucesivamente hasta 1692. Lo de menos es su fastuosa construcción en medio de extensos jardines decorados profusamente y exquisitamente cuidados. Lo importante es lo que simbolizaba para los franceses de aquellos siglos de hambre. Un palacio que representaba el derroche más absoluto, la riqueza más insultante, la estupidez más sublime. Hasta 3.000 personas llegaron a vivir en el palacio entre nobleza, cortesanos y cortesanas varias, criados, soldados y paseantes; la sala de los espejos tenía 375 espejos que reflejaban a todas horas la locura del absolutismo.

Los llamados Estados Generales estaban formados por estamentos que el rey convocaba a título consultivo, aunque él tomara las últimas decisiones. El Primer Estado lo formaba la nobleza, el Segundo, el alto clero, y el Tercero, la burguesía. Cuando el 5 de mayo de 1789 Luis XVI convocó los Estados Generales, un grupo de liberales, tanto nobles como burgueses, autoproclamaron el Tercer Estado o los ‘Comunes’ como Asamblea Nacional, es decir, como los únicos representantes legítimos de la soberanía popular. Decidieron reunirse en un edificio cercano donde los nobles solían jugar a la pelota, el 'Jeu de paume', y prometieron no disolverse hasta no dar a Francia una nueva Constitución.

El 14 de julio, el pueblo de París respaldó a sus nuevos representantes y tomaron la Bastilla, encabezados por una mujer vestida de amazona, que fue quien dirigió el ataque. ¿Lo sabían? Bueno, supongo que conocen al menos la pintura de Delacroix. La toma de la Bastilla no resolvió el hambre de los parisinos. Corría el 5 de octubre de 1789 y era el ‘día de mercado de las mujeres’. Éstas iban de mercado en mercado por todo París buscando un poco de pan para sus familias. Al tener que rendirse a la evidencia de la escasez absoluta ¿qué hicieron? Fueron a Versalles, airadas, gritando, imparables hasta obligar a los reyes a trasladarse a las Tullerías en París. ¡Se acabó Versalles! ¡Se acabó el lujo de los poderosos!

Como la situación económica no mejoraba a pesar de la revolución, se organizaron nuevas revueltas por parte de los 'sans-culottes' –los parados de hoy- que se unieron a los jacobinos. Tomaron el poder con Robespierre al mando y comenzó el reinado del terror, durante el que se asesinaron 40.000 personas. Y, más tarde, en 1799, el 18 de Brumario, Napoleón se coronaba emperador de Francia.

Os preguntaréis ¿para eso sirven las revoluciones? No, la gran diferencia es que tanto los reyes como Robespierre fueron ejecutados y Napoleón desterrado. Es decir, se crearon mecanismos –muy brutales entonces- para que la soberanía popular pudiera ejercer su poder legítimo. La Revolución Francesa, a pesar de los grandes errores, abrió las puertas al mundo de una nueva democracia, modelo para las constituciones de América, que también se independizaron de la monarquía española. Desde entonces Francia ha sido modelo de libertades y resistencia frente a los totalitarismos de cualquier índole.

España no hizo esa revolución. Un intento en las Cortes de Cádiz, otro en el trienio liberal, las dos repúblicas fallidas…. En fin. Incluso nuestra democracia reciente camina lastrada con un pasado del que no conseguimos liberarnos.

Ahora contemplamos atónitas nuestro Versalles particular de una gentecilla que, en nombre de la democracia, están viviendo como reyes. Una gentecilla que se paga sobresueldos mientras quita la paga extraordinaria a los funcionarios, que rescata bancos mientras hunde la Sanidad o la Escuela pública, la investigación, el estado de bienestar, la democracia en definitiva. Unos mediocres que viven opíparamente con nuestros impuestos, pero ya no con nuestra aquiescencia, con nuestro silencio, con nuestro conformismo. Lo peor: están generando paro, hambre, marginalidad, pobreza extrema, dolor, mucho dolor.

¿Para cuando la Bastilla, Versalles, el Jeu de paume, los sans-culottes, la libertad?

10.1.13

EL PARTIDO X


                                      

 

El día 8 de enero de 2013, lejano ya el solsticio del fin del mundo, ha surgido la iniciativa que muchas esperábamos: la organización del ‘espíritu del 15-M’ en una alternativa a los partidos tradicionales: El Partido X-Partido del Futuro. No es un partido más, todo lo contrario, ya que esta organización huye de todo protagonismo y sólo quiere a través de la Red recoger las alternativas, las luchas y la necesidad inmensa de cambio de la ciudadanía en general. Y, sobre todo, lo que trata esta organización abierta es la liquidación de la clase política tal como ahora existe. La casta política ya no nos representa en absoluto. Sólo está entregada a sus particulares intereses, a los intereses del partido en la medida en que reparten cargos y prebendas y a defender y proteger los intereses del gran capital, porque “el que a buen árbol se arrima…” No hay más que ver las consejerías multimillonarias de los presidentes que privatizaron según qué empresas públicas. ¿Estará Rajoy esperando algún cargazo en la Volkswagen o en el Deutsche Bank cuando lo botemos (con b)?

         Tenemos que darnos prisa en desalojarlos, de lo contrario trocearán el país y lo venderán al mejor postor; o bien, nuestra salud y nuestra educación existirán para saciar el ánimo de lucro de unos cuantos chupópteros. Creo que esta iniciativa merece nuestro apoyo, ya que es la nuestra. La de todos los que hemos asistido a manifestaciones, asambleas, protestas o hemos criticado fundadamente a la clase política o financiera. Mientras ellos se agarran a sus silloncitos a la vista de la ciudadanía escandalizada (los imputados que no dimiten, los que se niegan a primarias, los que no comparecen, los que gobiernan con decretos, etc.) nosotras, las personas, estamos por la transparencia, por el servicio, por la solidaridad y por que los políticos respondan a lo que el nuevo No-Partido proclama: “Ni diputados, ni señorías. Empleados públicos al servicio del bien común”.

         No quiero hacer de portavoz de algo que habla por sí mismo: http://partidodelfuturo.net