Ha habido varias personas que en el anterior post han manifestado sus dudas respecto a que este país nuestro pueda salir de su situación un tanto pasiva, atrasada, indolente y varias cosas más con esta pasión por el fútbol, en lugar de salir masivamente a la calle para protestar contra el paro, contra los políticos o contra cualquier otro demonio familiar.
La verdad es que jamás me había interesado el fútbol y mucho menos los futboleros, pero esta vez ha sido distinto. Ha habido tal bombardeo de noticias y comentarios sobre el evento, que al fin me ha apetecido ver los dos últimos partidos. Y los he visto. Y me han gustado. Y me han hecho reflexionar.
Antes hubiera dicho que once millonarios en calzoncillos no me movían una fibra si no era para cabrearme, pero esta vez he sacado otras conclusiones. En ellos he visto LA EXCELENCIA. Eso precisamente que nos falta en un país de fulleros, de fracasados escolares, de viva la Virgen, de ‘pan y circo’ o ‘pan y toros’. Me he reafirmado en que todo depende del sistema educativo, de cómo eduquemos a nuestros niños y jóvenes. Ellos, los futbolistas, han sido entrenados en hacer equipo y no en la ‘competitividad’ que tanto pregona la clase política. No hay que ser competitivos, sino competentes. No se trata de tener figuras, sino grupo cohesionado. Han sido entrenados en la austeridad más absoluta, en la repetición de jugadas, en el esfuerzo físico y en el control mental. ¿Qué tal si adoptáramos estos valores en la educación? Y no en que todo sea muy divertido, muy relajado, sin traumas y esas bobadas. Hay que vivir traumas, frustraciones, desencantos, sufrimientos varios para aprender a superarlos, en lugar de criar gordos fofos, inútiles intelectuales y pasivos receptores de todo lo que les echen.
Se habla ahora de la excelencia en el deporte español y siempre se nombra a los mismos: Nadal, Gasol, los motoristas, Fernando Alonso… ¿Y Edurne Pasaban? Nadie la nombra, no estaba en Sudáfrica. A mí me parece una deportista impresionante, al igual que en el fútbol femenino hay equipos estupendos. ¿Por qué no sabemos nada de ellas? Por lo de siempre.
3 comentarios:
Se fomenta el deporte como espectáculo que genera dinero, ya sea el mundial de fútbol, fórmula I, tenis, golf, ciclismo, etc. De esta forma, a pesar de la excelencia de la selección de la roja habrá cada vez más gordos fofos dispuestos a contemplar el espectáculo por no fomentar una cultura encaminada a la práctica del deporte y no me refiero a machacarse en un gimnasio para perder kilos.
¡¡Momento!! Edurne Pasabán es un fenómeno. Y es un fenómeno aparte, porque practica un deporte ultra minoritario, de alto riesgo, alto coste y prácticamente nula posibilidad de rentabilidad masivamente publicitaria, por sus propias características. más que un deporte es un desafío al límite. Es un deporte que ni siquiera se puede visualizar por el público. Solo tener información de sus resultados, aderezada con cuatro fotogramas escalofriantes. Pues bien; así y todo no creo que haya nadie que no conozca a Edurne Pasabán. Se la ha premiado, se la ha entrevistado, ha aparecido en toda clase de audiencias y entrevistas (gráficas y escritas) y si no ha estado en Africa será porque no le ha dado la gana o no le gusta el fútbol.
En cambio, tu punto de vista sobre el fútbol me ha gustado mucho
Excelentes todos tus artículos.
Saludos
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